Esta curiosa iglesia románica rural es verdaderamente interesante por el relieve esculpido en el tímpano de la puerta principal que representa la lucha de Sansón y el León.
La Iglesia de Santiago de Taboada, está en la parroquia del mismo nombre, perteneciente al Ayuntamiento de Silleda, en la provincia de Pontevedra. Esta parroquia es conocida por el famoso puente que comunicaba Deza con Trasdeza. El primer puente fue de tablas (Pons Tabulata) de ahí su nombre y el segundo de piedra que se construyó en la época medieval y es de estilo románico, que aún se conserva, con una inscripción en una roca próxima en la que figura el año de su construcción, el 912. La iglesia está ubicada en pleno camino de Santiago en la conocida Vía de la Plata, que sale de Sevilla y llega hasta Santiago de Compostela. En sus proximidades se encuentra un monumento conocido como el “peregrino anónimo”, una escultura del Apóstol Santiago, un cruceiro de fuste cónico acanalado con altar y un antiguo sarcófago antropomorfo posiblemente de origen altomedieval. Dice la leyenda que todo peregrino que pase delante de esta iglesia debe golpear la puerta con la cabeza.
La iglesia Santiago el Mayor de Taboada, es un claro ejemplo del arte románico de transición, construida a principios del siglo XIII, es de planta rectangular, de unos diez metros de largo por algo más de cinco de ancho, que se prolonga en la capilla mayor, sensiblemente cuadrada, señal de antigüedad. Separando la nave de la capilla hay un robusto arco toral de medio punto y doblado, que apoya en medias columnas adosadas y terminadas en grandes capiteles con decoración de amplias hojas. La capilla mayor está abovedada y refuerzan la bóveda dos arcos torales, también sobre medias columnas y con capiteles decorados con amplias hojas.
La cabecera de la iglesia esta ocupa por un curioso retablo de arte barroco popular en cuyo coronamiento hay una interesantísima interpretación de la batalla de Clavijo, en la cual los combatientes cristianos visten a la moda del siglo XVIII. Recibe la luz de un ventanal que hay en el muro del Sur, ya que el ventanal que da al Naciente está cegado y en donde estuvo el ventanal del Norte se abrió la puerta de paso a la sacristía, de construcción más moderna, del siglo XVIII. La nave tiene una diminuta saetera al Sur y dos ventanales al Norte, en cuya pared se abre asimismo una puerta pequeña y adintelada.
En el exterior del templo los muros laterales tienen doce canecillos cada uno, algunos decorados y a sus extremos sobresalen unos sencillos contrafuertes. El ábside exteriormente es cuadrado y el muro está decora con un elegante ventanal románico de medio punto, formado por dos esbeltas columnas con capiteles, decorados el de la derecha con dos pelÍcanos, símbolo de la caridad, es un animal que aparece en los sagrarios, se pica a sí mismo para que salga sangre y poder alimentar así a sus crías y el de la izquierda con dos figuras humanas en pie y aparejadas. Entre los capiteles y el arco se interpone un cimacio de nacela sencilla y sobre éste se apoyan el arco compuesto por un toro y una escocia y una gran arquivolta de menudos y finos cuadros ajedrezados. La saetera del ventanal está cegada y en el interior, probablemente, habrá otro arco que corresponda a éste, hoy oculto por el retablo, como es costumbre en el románico rural gallego.
La fachada es sencilla y austera. Sobre la puerta principal que presenta forma abocinada, se abre un estrecho tragaluz y encima se alza el campanario que es cuadrangular de doble cuerpo, con balconada circundante y con dos huecos para las campanas, rematado por cinco pináculos, de los cuales el central soporta una cruz. Este campanario se construyó en estilo barroco en el siglo XVIII.
El verdadero interés de la iglesia se centra en la portada principal y concretamente en el tímpano de la puerta. La decoración de la portada consta de cuatro columnas exentas, acodilladas y puestas sobre basas molduradas y con garras. Los fustes son lisos y monolíticos terminados en capiteles con decoración vegetal bastante esquemática y éstos, a su vez, soportan un cimacio de nacela simple y sin ornamentación que corre más allá del arranque de los arcos que son de medio punto y peraltados, formados por un sencillo molduraje de bocelones y escocias alternados en el intradós y en el trasdós que le dan una gran severidad.
El tímpano descansa sobre dos elementos sobresalientes con cabezas de bóvidos, los cuales son el remate de las jambas de la puerta, cuyas aristas se suavizan con un fino listel. El espacio semicircular del tímpano situado bajo los arcos de la portada está ocupado por un relieve que representa la escena de la lucha de Sansón con el león. Sansón está representado como un personaje imberbe, de pelo corto, desnudo, sentado sobre el león, mirando al espectador y cabalgando sobre el lomo de la fiera y con su mano diestra agarrando la quijada inferior de la fiera, que se apoya en el suelo sentada sobre sus patas traseras dobladas hacia adelante, mientras Sansón alza un poco su mano derecha en inútil gesto de defensa. La cola del león pasa por debajo de sus patas. La talla es tosca y de escasa calidad técnica, tanto es así que la cabeza del león parece más bien la de un caballo. El grupo de Sansón y el león, mira hacia la derecha del espectador y se aloja bajo un arco pentalobulado.
El tema de la lucha de Sansón con el león es muy antiguo y de gran tradición en la iconografía cristiana, desde la Alta Edad Media. Abundan sus representaciones a lo largo de los caminos de peregrinación, tanto en España como en Francia, existiendo también notables ejemplares en Italia.
El motivo de Sansón y el León se suele hallar preferentemente formando parte, como elemento decorativo de numerosísimos e interesantes capiteles, pero también se le encuentra en dovelas, en albanegas, en jambas, en modillones, en repisas, se utiliza, también, para decorar las tablas de los púlpitos, y las fachadas de algunos templos. Quizá el mayor número de representaciones del tema sansoniano, después de las que se encuentran en capiteles, sea en las sillerías de los coros de las catedrales. Por último, se emplea también para decorar relicarios, sarcófagos e incluso tapices.
Esta escena del tímpano de Santiago de Taboada tiene relación con las representaciones de Sansón de los tímpanos de las iglesias de San Juan de Palmou, Pazos de San Clodio, Santa Olaia de Beiro, Santa María de Taboada dos Freires, San Martín de Moldes y San Miguel de Oleiros.
Bibliografía: José Ramón Fernández Oxea (Ben-Cho.Shey), “La iglesia románica de Santiago de Taboada y su tímpano con lucha de Sansón y el león”, Compostelanum, X, 1956, pp. 178-194
Antonio Vidal Neira, Madrid, 14/1/2015
Publicado en Faro de Vigo, 35/1/2015
Muy buen artículo! Ya ves que hay mucho de lo que escribir de esta rica comarca de Deza. «O caso é querer!»
ánimo, vale la pena dar a conocer toda esta arquitectura religiosa del románico. Un saludo.